Su testimonio era aguardado ansiosamente. Ocho años después que el
ex presidente Alberto Fujimori y su oscuro jefe de seguridad Vladimiro Montesinos huyeron
del país, los peruanos esperaban notables revelaciones cuando Montesinos apareció
en el juicio a Fujimori sobre abusos contra los derechos humanos la
semana pasada. Su desempeño fue, en verdad, notable, pero no por las
revelaciones. En cambio, Montesinos negó que Fujimori haya tenido ninguna responsabilidad por las violaciones
a los derechos humanos durante su gobierno. En vez de respaldar a Fujimori,
el apoyo de Montesinos perjudicó su credibilidad y, en el proceso,
cualquier resurgimiento del Fujimorismo.
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